El antiguo Ayuntamiento de Madrid, el presidido por Manuela Carmena, quiso iniciar un proyecto tan ambicioso como el de “convertir Madrid en una referencia en el mundo del Big Data” unas semanas antes de finalizar su legislatura. Quería responder de forma práctica a la pregunta “¿Cómo diseñar un Clúster de Big Data en Madrid que sea a la vez vanguardista, dinámico y abierto a la sociedad?”.
Esa fue la cuestión que formuló a Empresa&Sociedad el Ayuntamiento de Madrid a finales del mes de abril y que acabamos de responder a finales de junio. Había que conjugar un diseño que contemplara visión estratégica, innovación, liderazgo compartido, operativa colaborativa y autofinanciación desde el minuto uno. Piperlab le habló al Ayuntamiento de Empresa&Sociedad y de nuestra experiencia en Clústers autofinanciados solo por el mundo empresarial, entre ellos el de RSC (1995), Empresa y Discapacidad (2000) o nuestro actual ClústerB2B.
Nuestra propuesta estuvo no solo fundamentada en el qué hacer sino especialmente en cómo hacerlo para proponer una solución genéticamente colaborativa entre un grupo de personas seleccionadas entre grandes empresas y entidades, emprendedores especializados y el propio Ayuntamiento. Nosotros mismos nos encargamos de la preselección de casi 50 personas/entidades, de las que seleccionamos a los 25 participantes en colaboración con el Ayuntamiento y encargamos a osmotic la operativa para llegar a una misión, visión y grandes líneas de actuación compartidas, interviniendo solo indirectamente por nuestra parte “como mano que mece la cuna” para no influir en fases posteriores.
El objetivo común era que todos los participantes se convirtieran en evangelizadores personales e institucionales por sentir el proyecto como propio. Además, así se vive el carácter abierto desde el principio y se facilita la dinamización posterior.
El trabajo se realizó en apenas dos meses. Durante las cuatro primeras sesiones, que fueron presenciales de medio día (cuatro horas) y las tres semanas intermedias, cinco equipos de cinco personas por equipo generaron una dinámica alrededor del proyecto y cada uno fue elaborando sus propuestas de estrategia de forma independiente, como si todo dependiera solo de cada equipo.
En la cuarta sesión tuvo lugar una presentación de la estrategia diseñada por cada uno de los cinco equipos durante las tres semanas de trabajo colaborativo y un debate final sobre cada una. Cada propuesta fue una valiosa fuente de reflexiones e inspiración sobre la solución final, que se elaboró una semana después en una quinta sesión por parte de un grupo de al menos un participante de cada equipo. Su objetivo fue aunar el trabajo realizado en los equipos en una única propuesta de plan y estrategia común. Participaron siete personas, elegidas grupo por grupo entre los 25.
El dato se convertirá en actor central de la economía.
Los participantes consensuaron una visión de futuro en la que cualquier actividad generará datos que serán la base sobre la que se construirán todos los servicios públicos y privados relevantes.
Todos seremos demandantes y oferentes de datos.
El dato se convertirá en actor central de la economía, hasta el punto de que sus actividades se centrarán en torno al Big Data y las tecnologías derivadas.
Los actores del ecosistema evolucionarán del actual entorno competitivo y opaco a uno cooperativo, transparente e interactivo.
Será clave un comportamiento y una gestión ética de los datos por parte de todos.
El Clúster de BigData de Madrid debe ser una aportación valiosa para la sociedad, potenciando las oportunidades y gestionando activamente los riesgos, especialmente los relacionados con la ética.
En ese sentido, los participantes se han identificado con un Cluster cuya misión se puede formular como “Data Driven for Society” (DD4S).
Sus principales valores diferenciales deben ser:
El primer ejercicio que toca hacer es completar el diseño consensuado hasta ahora con actividades concretas en torno a cuatro líneas preacordadas:
Las actividades deben hacer que el Cluster sea financieramente sostenible desde el principio por el sector privado. Es decir, deben ser actividades en las que las empresas estén claramente interesadas en invertir porque tienen un retorno adecuado, liberando al sector público de cualquier compromiso financiero porque son autosostenibles. Esta es la prueba del algodón desde el punto de vista de creación de valor, porque las empresas solo pagan por aquello que tiene un claro retorno.
En cuanto a la forma jurídica y gobernanza, el primer paso será conseguir el compromiso de las entidades que quieran participar en su puesta en marcha, no solo de las personas que de buena fe han dedicado un valioso tiempo personal hasta ahora. Quizá a partir de una Alianza Inicial y de financiar proyectos de interés común más que de empezar por crear cualquier forma jurídica, y donde la financiación sea 100% privada. No es nada nuevo, ya que así ocurre desde hace unos años en el Foro de Empresas por Madrid.
Además del diseño técnico anterior propiamente dicho, el valor especial del Clúster hasta ahora es que ha sido un Clúster genéticamente colaborativo. En el que se han alineado la visión, la misión y las líneas iniciales de actividad, que no es poco dada la diversidad de participantes. Un tema no menor, como demuestra el hecho de que varias empresas de consultoría se hayan interesado ya en participar en las fases posteriores como coordinadoras del proceso.
Ahora hay que pasar del compromiso personal de quienes han vivido una rica experiencia personal al de sus empresas e instituciones, que decidirán con criterios diferentes y complejos, no siempre coincidentes con los personales de los hasta ahora participantes. Toca pasar de las musas de los expertos al teatro de la alta dirección empresarial.
Habría sido mejor empezar por un agradecimiento de la Vicealcaldesa a los 25 cracks que dedicaron un valiosísimo tiempo personal y profesional, poniendo lo mejor de sus conocimiento y habilidades al servicio de una iniciativa de indudable utilidad pública, y al Gobierno Municipal que echó a rodar la pelota por el terreno de juego y nos convenció a todos de que apostáramos, independientemete de qué partido ganara las siguientes elecciones (ver la nota de prensa en este enlace).
Cosas de la política, que no es consciente de que también sus gestores y su comunicación serán sustituidos enseguida por robots capaces de optimizar el bien común gracias a algoritmos que no se olvidarán de ser agradecidos, simpáticos y buenos comunicadores. Serán contenidos tan automáticos como hoy es de intuitivo para cualquier «administrado» de a pie.
Pero seamos positivos. Ahí va una propuesta: estos algoritmos podrían ser un buen primer MVP del Cluster de Big Data de Madrid, como Caso de Uso autoexplicativo de su propia utilidad.
Punto y aparte. Misión cumplida por Empresa&Sociedad como Fundación, que debe retirarse siempre cuando ha generado interés en el sector privado antes de competir deslealmente con él aprovechándose de su fiscalidad favorable. Así lo hicimos en su día en el mundo de la R”S”C o de “Empresa+Discapacidad”. Sólo optamos a proyectos únicos y vocacionales como fue el inicio de este proyecto por su perfil, a pesar de unas condiciones cuyo detalle es mejor obviar.
Por nuestra parte, simplemente nos gustaría que políticos y no políticos fueran especialmente fieles al diseño consensuado, que hemos visto que incluye puntos muy importantes para el éxito en el futuro:
Seguro que es así, porque de esta manera los robots se podrán dedicar a otras cosas. O igual es mejor que no.
Documento presentado al Ayuntamiento
¿Cómo convertir a Madrid en una referencia en el mundo del Big Data?
Madrid aspira a ser referencia internacional en Big Data